Esta entrada me la ha dejado escrita mi hija Jennifer, alias “la emprendedora”, instigadora incansable para que me hiciera un blog  (¿Será porque se dedica al marketing digital? ;D)

Hay personas que se esfuerzan mucho, muchísimo por intentar agradar, por hacer amigos, por que se les recuerde,… y después existen las personas que tienen ese don en su adn, personas a las que podrías pedir que te acompañasen a un entierro o a salir a bailar, a una cita al médico o a tomar un café con desconocidos, y siempre estarían a la altura, con su mejor sonrisa dejando una huella imborrable. Así es mi madre. 

El pasado 5 de enero le hice este vídeo para su cumpleaños y lo compartí en Facebook. Es un vídeo humilde que refleja exactamente cómo yo la veo: una niña grande. Porque por muchos años que cumpla, su mirada irradia ilusión, alegría, curiosidad,… como si fuera una chiquilla.

Sí mamá, tienes algo muy grande que todo el mundo detecta. Eres una mujer #paloquesea que viene a significar que todo el mundo te quiere a su lado. ¡Qué raro que busques constantemente la soledad! Será que esa sonrisa necesita descansar de vez en cuando…

Y ENTONCES LLEGÓ FACEBOOK

Fue hace varios años que tras ver cómo tus hijos pasaban mucho tiempo relacionándose en esta red social pediste que te hicieran un perfil. Superadas las barreras tecnológicas iniciales, te has convertido en la reina del Facebook, esa ventana desde donde extiendes tu encanto personal al mundo con un café por las mañanas o con frases ingeniosas y divertidas para alegrar el día a todos. No es extraño que te siga tanta gente y te digan que a veces, buscan tus publicaciones en los «días de mierda» para echarse unas risas.

No conozco mayor relevancia social que ésa. Ya quisieran muchas influencers poder decir lo mismo sin ir de la mano de nadie, sin publicitar nada,… solo con esa cabecita loca de niña grande y voluntad, mucha.

LA BUENAABUELA SE HACE BLOGUERA

Y entonces llega el momento en que te obligo a que tus mensajes, tus experiencias de vida, tus reflexiones y tus ocurrencias tengan más durabilidad que una publicación en Facebook, que dejen más huella que un «me gusta» en una red social.

Creo que hay muchas personas que conectarían contigo encantadas  y a las que todavía no conoces. Madres de familias numerosas, abuelas que están ahí para sus hijos y para sus nietos, traficantes de tápers en potencia que se han vuelto a tirar al suelo y a jugar con plastilina después de años sin hacerlo, mujeres en edad parecida a la tuya a las que les encantará conocer a otras mujeres con vidas parecidas, o no , que les encandilen con anécdotas del día a día, amantes cocineras que busquen recetas de toda la vida con un punto loco como solo tú sabes dar, o cualquiera que te conozca y como yo, quiera que le sigas alegrando la vida todos los días.

Con este blog quiero que tu ventana al mundo, se convierta en una puerta. Que la abras, te asomen y grites al mundo que como tú solo hay una única e irrepetible, y que tienes mucho que contar y aportar desde hoy.

Disfrútalo mamá, ya eres bloguera.